martes, 30 de noviembre de 2010


Ahora mismo, que no puedo tenerlo, no me queda más que recuerdos. Tristes, felices, grandes, chicos, de colores, en blanco y negro, en dolby sorround, traducido y subtitulado a todos los idiomas habidos y por haber. E incluso inventamos uno que todos dicen conocer pero pocos hablan. El idioma del amor, que ni de lejos se parece al idioma del franchute. Todo pasó. Tengo guardados tantos recuerdos. Videos, conversaciones por msn, cartas, escritos, su perfume, mi piel marcada, sus besos que recorrieron mis labios tantas veces, su sexo perdido en mis caderas, las miles de sensaciones y más que nada, sus dulces palabras.
Todo eso me pertenece. Todo de él es mío. Todo lo mío le pertenece y yo soy ahora en este momento de mi vida solamente un ser que existe para él.
Me consuela saber que mis recuerdos son solo míos, que lo que pasó se queda en nosotros dos y que nadie podrá robarnos ni un segundo de todo lo que nos pertenecía.
De todas maneras, ¿de qué se enamora alguien cuando se enamora? ¿Te enamoras de la persona, o de la imagen que te hiciste en la cabeza de esa persona? ¿Te enamoras de lo que sos cuando estás con ella? ¿Te enamoras de lo que sentís? Te enamoras como una idiota aunque sabes que va a terminar mal. Que todas las historias de amor, incluso las más rosas, terminan mal. Pero a mí, la reina de las estúpidas, me había pegado feo, porque me había enamorado de una persona con el corazón en silla de ruedas. Un corazón inhabilitado, un corazón que le corresponde a una persona de ciento dos años, un corazón podrido, enterrado.

domingo, 28 de noviembre de 2010


Este "nunca" no esconde un "ojalá", estas cenizas no juegan con fuego, esta ciega no mira para atrás. Este notario firma lo que escribo, esta letra no la protestaré, ahórrate el acuse de recibo, estas vísperas son las de después. A este ruido tan huérfano de padre no voy a permitirle que taladre un corazón podrido de latir. Este pez ya no muere por tu boca, esta loca se va con otro loco, estos ojos no lloran más por ti.

martes, 23 de noviembre de 2010

Te vistes de azul para opacar el cielo, y consigues espejos para estar bien segura, que eres bella, y que hay que ofrecerte tributos de sol si regalas un beso.
Narciso el instinto que domina tu esencia,
y es idiota el consumo de mi tiempo contigo, sueños rotos, los que me vas dejando en mi activo de vida.
De que me sirve tu cuerpo, si lo administras con saldos de los que quieres darme, de que me sirve tu boca, si se te caen los besos y los recojo humillado.
Mujer de lujo, mujer florero, mujer de risas, olor y caprichos, con futuros de nada, mujer de lujo, mujer cortina, adornará tu cabeza la sala de un tipo cazador de reliquias, y te harás vieja sin sueños.
Trataré de encontrar en un vientre sencillo, el calor que el deshielo me apago tantas veces, y le daré de regalo, lo que no tiene precio ni tendrá en el mercado.
Te deseo la suerte, lo que no te mereces, la que no andas buscando, la que nunca precisas, mientras dure, ese cuerpo perfecto que se gasta en el tiempo.
De que me sirven tus manos, si están tan lejos de un roce como yo de tus sueños, de que me sirven tus ojos, si les importa un carajo si me voy o aparezco.
Mujer de lujo, mujer florero, mujer de risas, olor y caprichos, con futuro de nada, mujer de lujo, mujer cortina, adornará tu cabeza la sala de un tipo cazador de reliquias, y te harás vieja sin sueños, sin amigos, sin mi, sin nada.

jueves, 18 de noviembre de 2010

Pasare por ti esta noche ya conozco de memoria el camino hacia la casa donde fui feliz un día y hoy soy una visita mas, me recibes fríamente todo está tal como antes...mas tu cuarto tiene llave por si atacan los recuerdos y nos da por recordar.
Se supone que por ti no sienta nada que el pasado no me pesa ya, se supone que es muy fácil repetir que bien me va, aunque muy dentro me esté muriendo, se supone que mejor fue separarnos que la vida debe continuar, se supone que ya no me importe quién te besará esa es mi pena por suponer que te podría olvidar
Ahora que no me perteneces te ves mucho mas bonito tan seguro de ti mismo una flor inalcansable a la que no podre arrancar, que tanto debo haber fallado si conmigo estabas triste hoy te sobra la alegria pero ya no hay duda para que volver atras.
Me despido en el portal y me trago de un suspiro las palabras tú ya tienes otro amor yo regreso a mi dolor yo no tengo nada mas

lunes, 15 de noviembre de 2010

Quizás les haya pasado en alguna ocasión. Quizás, alguna vez, caminando por la calle les pareció ver entre el tumulto de la gente a una persona a la que amaron hace mucho tiempo. Apenas fue un instante, un breve destello de luz, pero lo suficiente como para dejar una quemadura en la retina y en el alma. Lo suficiente como para dejarte paralizado en mitad de la calle, sintiéndote a contracorriente de todo. Sin saber muy bien qué hacer o qué decir.Se le llena a uno la cabeza de recuerdos. Y el caso es que no estás seguro de que se trate de esa persona. Porque primero fue, como digo, un breve instante y en segundo lugar, porque hace tanto tiempo desde la última vez que lo viste, que todos hemos cambiado en este tiempo. Y él también aunque, a veces, me niegue a reconocerlo. Y está bien que así sea.El caso es que entonces uno se queda dudando en mitad de la calle, pensando si no será que uno confunde la realidad con el deseo. Quiero decir que quizá sí se trate de esa persona, pero a lo mejor no. A lo mejor uno lo desea tanto que la inventa entre la gente. Desapareciendo y apareciendo. Apareciendo y desapareciendo. Y no digo que quedara algo urgente por decir, algo pendiente. Quizás no sea eso. Quizás sea un deseo inconsciente. Y uno sólo quiere encontrarse con ella para decirle cualquier tontería. Quizás para recuperar un retazo de aquellos tiempos en los que éramos eternos y vulnerables. Quizás sólo para decir, ¿qué ha sido de vos en todo este tiempo?, ¿qué fue de nosotros?, ¿Qué ha sido de mí?

viernes, 12 de noviembre de 2010

Ojalá te hubieras dado cuenta que, a pesar de las caídas yo seguía construyendo para ti, nuestro mundo día a día y ya no estas, y ya no estoy en tu vida. Ojala hubieras visto mas allá de tus ojos, de mis ojos, para que me puedas entender mejor, lo que digo, lo que pienso, entender lo que yo siento en mis adentros.
Ojalá hubieras entendido mi dolor cuando estuve solo, ojalá hubieras abierto tu corazón para prestarme tu hombro, ojalá hubieras entendido que vivía por tu amor y ahora muero, y que yo siempre pensaba en ti primero, que eras tu mi sol, mi centro, mi Universo. Ojalá hubieras disipado tú esas dudas y la voz de los demás, que intentaban confundir tu realidad, y ahora yo lo estoy sufriendo, no escuchaste tus adentros, y ya no hay tiempo.

miércoles, 10 de noviembre de 2010


Esta voz quebrantada te pide que te vayas y que ya no vuelvas, dime cuantas veces yo eh llorado te extrañado y no te ah importado, dime cuantas veces.
Amiga dile cuantas veces eh llorado por estar sentada viendo su retrato, dile cuantas veces

lunes, 8 de noviembre de 2010


Me duele verte hasta en fotos.
Me duele verte hasta en fotos.
Me duele verte hasta en fotos.
Me duele verte hasta en fotos.
Me duele verte hasta en fotos.

Sabía que esto iba a pasar. Y cuando dijiste "necesito estar solo" yo no supe que decir y dentro mío moría la esperanza que instauraste apenas te metiste en mi vida. Me sentí asfixiada y el espacio entre los dos se hizo tan infinito como las mil cosas que ya nos distancian desde siempre. Mis ojos se iluminaron, embargados por la tristeza, llenos de pudor y verguenza de quererte y no poder pararme, no poder advertirme la caída, y adorarte aún cuando (me) destruís y te aprovechas de mis debilidades y mi poca fuerza. Me veo morir, me veo agonizar a tus pies, pidientode clemencia, piedad. Mi corazón se desarmó, y escapé de tus palabras. Corrí al auto donde papá me esperaba para ir a comprar. Respiré ondo el aire frío que te cala los huesos y miré al cielo en busca de fuerzas para no llorar, por favor, no quiero llorar enfrente de papá, soy fuerte, siempre lo fui y no dejaré que el amor me tire otra vez abajo...Bueno, eso me decía, una gran mentira para ser sinceros. Me subí al auto y entre preguntas como: ¿estás bien? ¿hay algo que quieras contarme? ¿va todo bien en la facu ?; yo me mantuve callada y asentí con la cabeza las veces que pude y las que necesitó de un si o un no, se los dí rápidamente para no dejar escapar ni un sólo gemido de angustia. De esos gritos que queman las palabras en la garganta y no les dejan salir, y se quedan, y lo lastiman a uno, y uno sangra, y llora, y se siente desfallecer...
Te quiero con toda mi alma y eso no alcanza...Te estoy perdiendo y justo ahora, frente a mi pc lloro por eso. Porque estoy paralizada por un miedo que me hace caer en el lugar y no me deja correr hasta vos, alcanzarte y pedirte que no me dejes, decirte que te necesito y que sin vos...yo no se que hago. Y odio decirlo pero...es verdad. Nunca debí depositar todo en vos pero, no tenía otra forma, llegaste a mi vida como la última vida de un gato ya cansado de vivir y seguir luchando, me diste la mano y me pediste que no me rindiera y mirandote a los ojos supe que, tenía que tomarte la mano para salvarnos mutuamente. Pero ahora, que te tengo más lejos de mi que nunca...siento que me duele el cuerpo, que me duelen las ganas y la puta vida que no me deja dejarte. Y lloro desconsoladamente y se que se me oye desde las habitaciones contiguas pero hoy no me importa, por mi que las paredes se caigan, que la luz se apague pero que mi amor por vos, que tu amor por mi, se quede. Y no es posesión, ni obesión lo que poseo y siento por vos. Tengo la convicción de que no lo es. Te quiero tanto que mi cuerpo no lo aguanta, se hunde, se quema, se destruye por sentirte cerca. Si todavía no te pierdo y todo dentro de mí se ahoga, no quiero saber lo que va a ser dejarte ir. Porque si te quiero tanto como digo, voy a dejarte volar si es lo que deseas. Solo espero...que siempre vuelvas a mi...

domingo, 7 de noviembre de 2010

Te digo a vos: No esperes que diga que estoy bien, no esperes que me quiera, no esperes que escriba todas aquellas cosas hermosas que hablan de amor y ternura si hace mucho que no conozco siquiera el significado de ellos, no esperes que te pida perdón, no esperes mi compasión, no esperes que te sufra más porque simplemente no me lo voy a permitir. No esperes que te quiera después de todo, no esperes que te espere si nisiquiera puedo esperarme a mí misma, no esperes que escriba cosas lindas si todo en mi panorama está negro y borroso, no esperes que te mienta como todas aquellas compañías tuyas que lo hacen, no esperes que te diga que me cure el alma, no esperes nada de mí, no esperes que te hable como si nada, no esperes mi confianza porque te encargaste de arruinarla, no esperes mi consentimiento para tus ideas locas, no esperes que te siga porque cuando yo te pedí que me sigas, te acobardaste y alejaste de mí.
Si volves, te pido, no esperes nada. Acercate como un completo desconocido, acercate a mí para que de a poco te crea las mentiras, para que de a poco adormezcas el dolor, tomame de la mano como solías hacerlo y ganate mi confianza en el camino pero esta vez, por favor, no me dejes, no me sueltes nunca más...

viernes, 5 de noviembre de 2010


No debí leer las conversaciones que teníamos. No debí recordarte así. Tendría que haberme mantenido al margen. Pero nunca hago lo que debería. Aunque tus fantasmas merodean en mi pasado, algo te hizo volver ayer por la noche. Tus palabras se volvieron mi presente y por un momento, me agradó la idea de que alguien me dijese "mi amor, cielo, hermosa, gordita mía". Era tuya. Quería que lo nuestro fuese enserio, me jugue la vida por vos, aposté a lo que sentía y me tiré por el precipisio creyendo que ibas a sostenerme, que ibas a seguirme. Todos los momentos se borraron en ese preciso instante en que te pedí que me quisieras y te rehusaste a hacerlo. Todo se borro para mí. Y tu sonrisa se volvió mi llanto desconsolado, tu recuerdo la droga, tus besos la adicción y tus palabras mi condena. Era evidente que nada iba a salvarme de caer. Nadie entendía el dolor que sentía, nadie quería ver que en verdad lo único que necesitaba era que volvieras a mi aunque eso nunca fuera a pasar. No se como fue que te quise tanto, con tanta entrega sin condición alguna. De a poco me re-construí sabiendo que bajo los cimientos estan las memorias de aquellos lugares que pisamos juntos. Durante mucho tiempo, te rendí culto como a un dios. Para mi eras eso, gobernabas mi cuerpo, tenías el poder de hacer lo que quisieras conmigo. Supuse que algún día ibas a llamar, que ibas a pedirme que vuelva a tu lado, que te abrazara, que te prestase mi perfume para que se impregnara en tu ropa, que te regalara mis besos y compañía. Y lo hubiera hecho, si tan solo lo hubieras pedido, hubiese dado lo que sea. Ahora, todo ese dolor que nadie entendía se volvió indiferente, te superé, te dejé atrás pero de vez en cuando volves a mi como ayer y yo, no se si hecharte o dejarte aniquilar todo como antes solías hacer. Porque antes, eras real y ahora, sos solo un recuerdo hambriento de presente.

Pienso: "Te necesito". Y no se ni siquiera si es verdad pero justo ahora, me doy cuenta de que es así. Y quizás en diez minutos ya no te quiera más pero ahora te quiero y necesito como a nadie. Estoy aca sentada y quiero sacarme todo aquello que me hace mal. Es posible que este loca. Me gusta pensar que estar loca no es algo malo, sino algo que me hace única en mí, mi locura es lo que soy. Y querría que tus brazos me acurrucaran, que tus besos me sedaran y tus caricias me durmieran. Pero solo escucho el silencio porque en casa no hay nadie. Y me miro al espejo y noto que mis huesos no se notan lo suficiente, que nunca es suficiente y te me venís otra vez a la cabeza diciendome que soy hermosa así y sonrío aunque este llorando, me duela la garganta e incluso ya no desee vivir más. Y pienso, esta vez susurrando como esperando que alguien me escuche: "Ojala me salvaras, porque yo ya no puedo ni creo querer salvarme...". Y mi voz resuena en las paredes. Y sigo: "...pero se que no vas a hacerlo, porque si vas a salvar a alguien, va a ser a vos mismo". Y aunque lloré mas fuerte, nadie me escuchó

Justo ahora, quiero alejarme de vos. Desaparecer de tu entorno. No conocerte tanto como lo hago. Pasar nuevamente desapercivida antes tu indiferencia e ignorancia pero que no me duela, no tanto como ahora. Poder y tener las fuerzas para evitarte. Quiero ser una extraña para no depender de vos. Maldigo la hora en que apareciste en mi vida porque ahora, no tengo nada propio, nada parece pertenecerme, todo pende de un hilo que cuelga de tu mano que lo decide todo. Te quiero bien lejos, lo más posible, para no tener que caer en tus trampas. Odio esa mirada nefasta que me hace ver tu alma y desearte el doble de lo que lo hago normalmente. Te odio cuando crees que lo sabes todo, aún sabiendo que tenes razón. Amo tu fortaleza escondida y tu fuerza de voluntad contra toda adversidad. Entonces, otra vez, te quiero bien cerca para probarme y probar tu amor hasta el cansancio. Reaparecer en tu lado cuando la bronca de tus palabras silenciosas se borren de mi memoria. Que me hagas recordar los motivos, las razones y aquellas cuestiones que simplemente no tienen ni una sola explicasión y a las que a pesar de todo, tus labios saben darle significado. Que me digas que lo nuestro es infinito y que así también, existe. Quiero escucharte mentirme aún sabiendo que se la verdad. Quiero tus mentiras si son aquellas verdades las que nos tienen juntos e inseparables. Porque sencillamente, no me importa que título o apodo le pongas a lo que tenemos. A mi me basta con mirarte para saber que siempre vas a pertenecerme

Fue imposible sacar tu recuerdo de mi mente, fue imposible olvidar que algun dia yo te quise, tanto tiempo pasó desde el dia que te fuiste, ahi yo supe que las despedidas son muy tristes. Nunca me imagine que un tren se llevara en su viaje aquellas ilusiones que nosotros nos juramos, todos tus sentimientos los guardaste en tu equipaje, quisiste consolarme y me dijiste yo te amo. Desde entonces no supe que seria de tu vida, desde entonces no supe si algun dia regresabas los amigos del pueblo preguntaban si volvias, llorando di la espalda no les pude decir nada. Ayer que regresé a mi pueblo alguien me dijo que ya te casaste, mirame y dime si ya me olvidaste, me marcharé con los ojos aguados. Despues le pregunté a la luna me dio la espalda e intento ocultarse, hasta la luna sabe que me amaste, hasta la luna sabe que aun me amas. Vuela vuela por otro rumbo ve y sueña sueña que el mundo es tuyo, tu ya no puedes volar conmigo aunque mis sueños se iran contigo. Es tan triste tener que decirte que me olvides, otro amor ha llegado a mi vida y no te quiero. Es muy tarde no puedo negarte que me muero, pero no callaran mis palabras para decirte:
Que soñaré contigo siempre que cierre mis ojos
Que entonaré por ti mis cantos tristes noche a noche
Que lloraré sin ti cuando recuerde que estoy solo
y al recordar que duermes en los brazos de otra mujer, me pregunto si aun reflejas algo de mi vida, si en tu memoria vive aquel amor que vivimos, aquella mujer que siempre te ha querido que llora porque el amor de su vida se ha alejado.
Es triste ver que un tren se aleja y en el se va lo mejor de tu vida, dime el motivo de tu despedida ¿Por que te fuiste dejando mil penas? Un dia recibi tu carta quice leerla y era una hoja en blanco pues de tu vida nunca supe nada como preguntas que si aun te amo.

jueves, 4 de noviembre de 2010


No puede haber ¿dónde lo encontraría? otro hombre igual que tú. Con iguales emociones, con las expresiones que en otra sonrisa no vería yo, con esa mirada atenta a mi indiferencia, cuando me salía de la situación, con la misma fantasía, la capacidad de aguantar el ritmo despiadado de mi mal humor. Otro no puede haber, si no existe, me lo inventaré; parece claro que aún estoy envenenada de tí es la cosa más evidente. Y me faltan cada noche, todas tus manías aunque más enormes eran sin las mías, y me faltan tus miradas por que sé que están allí, donde yo las puse, apasionadas; justo sobre tí. Otro no puede haber, si no existe, me lo inventaré; parece claro que aún estoy envenenada de tí parece claro que... es la cosa más evidente, evidentemente preocupante, no, otro hombre igual a vos no creo.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Dos meses conviviendo con tu ausencia


No pensás ni un poco en mi, no te acordas de todo lo que sentías por mi. Te odio por inventarme un mundo lleno de ilusiones y un futuro con vos, por hacerme creer que estando con vos todo iba a ser un poco mas feliz en mi vida, por dejarme así sin ni siquiera decirme la verdad, que poco hombre que sos. No te dio la cara para decirme que ya no sentías amor por mi y aun así seguiste ilusionándome, mintiéndome y yo creyéndote cada palabra y aun teniendo la certeza de que algo me decía que tenia que desconfiar ¿Porque permitiste este sentimiento en mí? Si yo no te busque, no pretendía nada de todo lo que paso con vos. Ahora te fuiste para intentar reconstruir tu relación con ella y a mi me dejaste de lado sabiendo que yo te amaba y que estaba completamente enamorada de vos, no te importo si podría llegar a sufrir, no te importo nada de nada. Como siempre te importo vos mismo porque sos así, no medís las consecuencias de tus actos y en lo fallado y equivocado que estas. No se como describirte ahora, te convertiste en lo que sos, en lo que nunca vi, porque antes te veía como un amigo mas, y para mi eras demasiado bueno, sos muy cruel cuando te lo propones, sin embargo tu crueldad no me la merezco porque siempre estuve ahí cuando me necesitaste, cuando estabas mal siempre te aconseje, y así me pagas, me desprecias, te escapas, me esquivas, no me hablas. Se que de mi te olvidaste rapidísimo, ni te debes acordar, todos tus sentimientos y expresiones son para esa persona de tu pasado que nunca pudiste olvidar, esa persona que no sabe lo que quiere, que juega con vos, ahora para todos yo me convertí en la mala de la película, soy un cero a la izquierda y la verdad no se si me merezco todo esto, cada día se me hace mas difícil, me olvide de mi, no dejo de llorar aunque sea un poquito todos los días, ya no siento ese vacío en las mañanas ni en las noches, ni tampoco me duele tanto, pero me siento despreciada, como si nunca hubiese existido en tu vida, y eso me duele, saber que pierdo las esperanzas,que ya no me amas, a la final termine siendo una mas del montón, aun amándote mas que a mi misma, te deseo lo peor, no quiero que seas feliz porque vos no te das una idea de cómo sufro todos los días por vos, no te das una idea de cómo lloro al ver cosas que no quiero ver, te odio por hacerme llorar, por tener mal humor todos los días, por cambiar tanto mi animo en el día, por no poder dormir, por soñar con vos, por no tener ni ganas de vivir, por no verle sentido a nada, porque la verdad ya nada me hace feliz, no se que hacer, lo único que quiero es desgarrarme este sentimiento impregnado acá adentro, no quiero sentir mas nada por vos ni por nadie, no quiero amar mas a nadie, hasta acá llegue, no quiero volver a sufrir como lo estoy haciendo ahora. Ojala olvidar fuese mas fácil para mi, pero no puedo, vas a durar mucho tiempo en mi y aun así te espero, tengo la esperanza de que algún día vuelvas o volvamos a ser lo que alguna vez fuimos. Después de todo te entiendo pero… por lo menos no me hubieses ilusionado así, no me hubieses abierto la puerta de tu casa, de tu habitación, de tu colchón, no me hubieses dejado así como si nada, como si todo fuese tan fácil, aunque para vos lo es, pero para mi no. No se como haces para dormir todas las noches tranquilo, ¿No te come la conciencia por las noches, no te sentís culpable por lo que me hiciste, por lo que provocaste en mi? Por momentos te odio como ahora, pero después te extraño y así sigo mis días, recordándote a cada instante con una sonrisa y una lagrima a la vez, porque te ame y te amo todavía, dos mes sin vos, dos meses sin hablarte, dos meses sin saber por qué me mentiste así. No se si creer en Dios pero si existe le pregunto si en realidad me merezco todo esto que me esta pasando, si el destino me dio felicidad ¿Porque ahora me la quita? Porque es todo tan injusto para mi, porque ahora no puedo seguir y voy a tener que soportar y ser fuerte, otra no me queda, mostrarle al mundo que soy feliz, cuando por dentro en realidad me muero.

Solo

Solo